Fujifilm presentó la semana pasada la cámara que ya se ha convertido en un éxito de reservas sin todavía haber llegado al mercado oficialmente, la Fujifilm X-Pro 2, una cámara CSC sin espejo de la gama más alta, que aspira a competir con todas las grandes cámaras del mercado.

Fujifilm X-Pro 2

Cuatro años han tenido que pasar para que los aficionados a las cámaras de Fuji reciban una nueva versión de la que es la mejor cámara con la que cuentan en el catálogo. Una cámara que, además, con el apellido de Pro, ya deja claro que es el buque insignia de Fuji. Y llega con una cantidad de mejoras muy notable para que consideren que el futuro son las CSC (sin espejo).

Un sensor mejorado

Después de cuatro años, la resolución del sensor debía mejorar, y dejamos atrás los 16 megapíxeles para irnos hasta un sensor de 24,3 megapíxeles. SE trata de un sensor X-Transfer III APS-C, por lo que no hablamos de un sensor de formato completo. La sensibilidad ISO llega hasta los 51.200, lógicamente niveles en los que el ruido ya será perceptible, aunque Fujifilm asegura que se puede operar hasta los 12.800 con un buen rendimiento y sin percepción de ruido.

Mejor construcción

Otra de las características nuevas de esta versión con respecto a la versión anterior es la construcción mejorada, pues ha pasado a ser resistente al agua y al polvo. Podremos utilizarla bajo la lluvia, y podremos utilizarla también en el desierto, e incluso es capaz de soportar temperaturas de 10 grados bajo cero operando correctamente. Es una característica propia de las cámaras de nivel profesional. No puede compararse con las cámaras de nivel profesional de otras marcas, pero lo cierto es que ese no es el objetivo de Fujifilm con esta cámara, sino el de lanzar una cámara que presente un equilibrio dentro de lo que es la gama alta, y gracias a esto las cifras de reservas de la cámara ya son altísimas.

En lo que al diseño de la cámara se refiere, seguimos con la apariencia «telemétrica» propia de las cámaras de gama alta de Fuji. Con un acabado granulado y en un único color, en negro, pero con una construcción, tal y como ya hemos dicho, mejorada. Una cámara más resistente y más robusta, pero con un aspecto retro profesional.

Nuevo procesador

Pero ni un sensor ni una cámara es nada sin un procesador que se encargue de gestionar todas las operaciones en la cámara. Y el nuevo X-Processor Pro. Con este se mejora notablemente el tiempo de encendido, disparo y ráfaga con respecto a los modelos más estándar de Fuji y al anterior modelo de alta gama. Se consigue un autoenfoque en 0,06 segundos. Además, por cierto, esta otra de las novedades de la cámara, que cuenta con hasta 77 puntos de enfoque.

Visor híbrido óptico/electrónico

No podía ser de otra manera en una cámara CSC, el eterno debate del visor, y algo que todavía es considerado una carencia por los acérrimos a las cámaras DSLR con espejo. En este caso, Fuji sigue dando pasos apostando por lo que para ellos es el futuro, con un visor híbrido óptico y electrónico. En total, cuenta con tres opciones diferentes para el visor, y podemos seleccionarlas de una manera muy simple con un pequeño selector que encontraremos en la cámara.

¿Una cámara de vídeo?

En lo que al vídeo respecta, la nueva Fujifilm X-Pro 2 llega con la capacidad de grabar en Full HD hasta 60 frames por segundo, sin ser esta su característica más destacable, aunque sí que incluye algunos filtros interesantes, como el blanco y negro, o la posibilidad de agregar grano a los vídeos. No obstante, poco que hacer con sus rivales en este aspecto, aunque seguirá siendo una cámara que cumple en el aspecto del vídeo al ser capaz de graba en Full HD.

La Fujifim X-Pro 2 llegará en al segunda mitad del mes que viene, en febrero, y contará con un precio de unos 1.800 euros solo el cuerpo.